Ubicaremos el valle dándole la importancia que tuvo y que tiene en las comunicaciones entre la costa y la capital. Atravesaremos los pueblos de Albuñuelas, Saleres o Restabal y daremos vista la pantano de Izbor y el río Durcal.

Subiremos al monte Hacho, al norte de la ciudad de Loja hasta disfrutar de unas de las mejores vistas sobre el valle de nuestro río Genil y sobre la Sierra Gorda de la ciudad. En el descenso encontraremos los restos de la Ermita del Calvario y algunas cruces que jalonaron su Via Crucis. Por último, antes de entrar en el corazón de Loja tendremos que salvar las vías del AVE y la barriada de San Francisco.

Centenares de centenarios olivos en la vega de este pueblo alpujarreño.

Pasareamos junto al río Gualdalfeo que llena el pantano de Rules y su puente de los Siete Ojos. Bajo el puente, disfrutaremos de un breve descanso al murmullo del agua de nuestra costa.

Veremos el Molino de Benizalte que procede del siglo XVI; todo ellos vigilados de cerca por la Sierra de Lújar, que separa el pueblo del mar Mediterráneo.

Accederemos al barranco de San Juan en Sierra Nevada, pasando cerca de los peñones de San Francisco, del observatorio del Mojón del Trigo y de lejos, a la Virgen de las Nieve. Mientras recorremos el territorio disfritaremos del deshielo que se está produciendo llevando la consigiente floración endémica de esta zona. El agua limpia y pura bajará por las cascadas, llenando las acequias de la zona. Es posible que durante nuestro paseo veamos algún ganado pastando e incluso hasta cabras montesas.